Nick & Norah’s Infinite Playlist (Una noche de música y amor es la traducción castellana) es uno de estos títulos; una historia que cabalga entre la comedia de adolescentes y la romántica, que consigue exactamente lo que pretende: diferenciarse de las demás pero sin tener demasiadas pretensiones consiguiendo que que el espectador abandone la sala con esa agradable sensación de felicidad y buenrollismo que tanto echamos de menos a veces.
El guión es original y fresco. Los personajes están construidos a base de detalles y caractarísticas que les colocan a años luz de lo que estamos acostumbrados a ver. La dirección es hábil y la atmósfera es casi mágica en esta amable aventura musical por las calles de un Nueva York nocturno.
Los protagonistas son dos personas hechas y derechas, de esos adolescentes maduros con los que uno no tiene dificultad para sentirse identificado. El espectador se deja llevar gustosamente de la mano por Nick y Norah, su conexión, su pasión por la música, su idea de la amistad…
Lo mejor: El aura de buen rollo que rodea la película.
Lo peor: Su especto de ñoña puede ahuyentar a algunos.
Nick & Norah hacen que uno quiera enamorarse, que uno quiera pasar una noche loca en la ciudad en de ambientes y lugares, que uno conecte con alguien desde el primer momento y descubra en esa persona alguien a quien conocer a fondo… Nick & Norah es inocente y amable, pero a la vez es especial y divertida. Una de esas agradables sorpresas que uno no espera.