
Cuenta la leyenda que Hollywood se convirtió en la meca del cine gracias a un día de lluvia. A finales de diciembre de 1913, un tren se detuvo en una pequeña ciudad de Arizona llamada Flagstaff. De él bajaron los miembros de una productora cinematográfica que pretendían rodar en ese lugar un western titulado The Squaw man, dirigido por un joven Cecil B. DeMille. Flagstaff recibió a esos pioneros del cine con frío y una gran tempestad de agua y viento, así que el equipo decidió continuar su viaje hasta el final del trayecto, un apeadero cerca de Los Ángeles llamado Hollywood en la soleada California.The Squaw Man está considerado el primer largometraje filmado íntegramente en Hollywood, pero lo cierto es que desde varios años antes ya se rodaban...