01 noviembre 2006
Adri
La película cuenta la historia de una familia peculiar de un pueblo perdido de Dinamarca desde el punto de vista de un niño, excelentemente interpretado por Jaspero Asholt. Su padre es un experto en el arte de llorar: es depresivo y cada noche amenaza con suicidarse. La hija mayor, de unos 13 años, le "consuela" cada noche mientras que la madre mira hacia otro lado.
Tras descubrir una curiosa forma de animar a su padre, el joven Far dedicará día y noche a hacer que su padre sea feliz... aunque ello implique dejar cadáveres por el camino.
La forma que tiene Schornau de tratar un tema tan delicado como el abuso sexual o la muerte es admirable. Todo lo hace desde la inocente aunque inteligente y perspicaz perspectiva de un niño de 10 años.
Lo mejor: Henry.
Lo peor: Que probablemente no la estrenen en España o si lo hacen pase completamente desapercibida. Una pena.
The Art of Crying hace reir, llorar y mantiene al espectador atrapado y maravillado en unos personajes peculiares, una fotografía brillante y una historia entrañable y excepcional pero con mucha cotidanediad que dejan como resultado un título de lo más especial.
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