Sesión Conínua: Monstruos, viajes y autoayudas

No, no nos hemos olvidado de La Ultima Película y hoy vengo con una dosis Express de películas. El orden obedece a su fecha de estreno. Comienzo por las más cercanas.

Max es un jovenzuelo con una imaginación desbordante que saca de quicio a los que le rodean. En un arrebato y sintiéndose incomprendido y sólo, decide escapar de casa. Su aventura le lleva a la isla donde viven los monstruos.

Empiezo con Donde viven los monstruos, un recomendable título que ya se encuentra en cartelera. La nueva maravilla de Spike Jonze es un regalo para lo ojos. Posee un sentimentalismo y ternura únicos donde el preciosismo visual es un personaje más de la historia. Narra lo mejor y peor de ser niño (y de tener que crecer) de una forma muy emotiva, divertida, algo inconexa y sin darle vueltas innecesarias a las cosas.

Si es cierto que a veces es inevitable sentir que te has perdido algo ya que el pasado y presente de los monstruos es muy aleatorio e inconexo pero se entiende como un reflejo de los sentimientos e imaginación de Max, un jovenzuelo que puede ser cualquier cosa menos lógico.

A destacar la expresividad y empatía de los monstruos, sus personalidades y papeles en la historia, cada uno con un papel concreto y necesario en la historia. Es de esos films que tiene al espectador con una sonrisa permanente en la cara.

Sigo con Todos están bien, un drama familiar con toque navideño que se estrena el próximo 1 de Enero de 2010. Robert De Niro es el protagonista absoluto de esta historia sobre la familia, las decepciones y el dolor que puede provocar decir la verdad.

Frank prepara con entusiasmo una cena en la que reunirá a todos sus hijos. Cuando uno a uno llaman para cancelar su presencia, él decide hacer la maleta e ir a visitarles.

El personaje de De Niro es tan entrañable y frágil que conecta con el espectador ya desde el primer minuto. Está bien construido y presentado durante el film. Sin embargo, los hermanos y sus historias resultan demasiado vagas y superficiales.

Destacaría la forma que tiene la narración de jugar con el espectador de la misma forma que hacen los hijos con el padre… De Niro va de la mano con el espectador descubriendo las verdades ocultas a través de pequeños detalles e insinuaciones que se escapan en miradas, palabras o química entre los personajes que intentan engañarle.

A pesar de todo, este título no pasa de correcto. Es entretenida para ser de ritmo pausado, le sobra ese sentimentalismo facilongo del tramo final. Las apariciones espontáneas de los niños pequeños dan cuerpo a los sentimientos del padre, sin embargo, esa comida imaginaria que tiene con ellos hacia el final saca de un empujón al espectador de la película por resultar algo demasiado forzado y no sabe recuperarlo y atraparlo para el resto de metraje.

Bien para una tarde de cine familiar ahora en navidades pero sin duda colocaría cualquiera de los otros dos títulos de los que hablo hoy por encima de este.

Toca el turno a Love Happens, dramedia semiromántica protagonizada por Aaron Eckhart y mi querida Jennifer Aniston. Brandon Camp debuta con esta historia sobre la superación de la muerte de un ser querido y lo importante del apoyo externo en una situación como esta.

“Love Happens” cuenta la historia de un viudo que, gracias a un best-seller sobre cómo superar la pérdida de un ser querido, se ha convertido en un gurú de los libros de autoayuda. Sin embargo, en un viaje de negocios a Seattle, descubre que aún no ha llegado a afrontar verdaderamente la muerte de su esposa.

Me decidí a asomarme porque parecía una de esas comedias románticas tipiconas que tanto le gustan al monstruo choni que habita en mi interior pero me encontré con algo que nunca habría esperado de este título.

El título elegido es bastante desafortunado porque da una idea muy falsa de la historia potencial a lo que el cartel promocional no ayuda. Eckhart interpreta a un hombre que ha reconducido el dolor de la muerte de su mujer aprovechándolo para escribir un libro. No, no cae en el tópico del autodescubrimiento y redención de un individuo que ha frivolizado la muerte de un ser querido. No, tampoco cuenta una historia de amor con una mujer a la que miente o manipula porque aún no ha superado su viudedad y cómo esta le rechaza constantemente por no tratarla como prioridad.

Lo que cuenta Love Happens es cómo el protagonista falla a la hora de aplicar sus propios consejos y se da cuenta de que para acabar de cicatrizar sus heridas necesita el apoyo de los demás. La historia de amor es algo totalmente secundario en el film (Anniston, de hecho, aparece muchísimo menos de lo que uno espera).

Quizá no es la historia más profunda, ni la más original, ni la más romántica... pero lleva muy bien lo que quiere contar y lo hace sin florituras ni excesivas pretensiones, cayendo en algún que otro predecible cliché.

Love Happens comenzó como poco más que un visionado de placer culpable y poco a poco se fue convirtiendo en una película más que disfrutable e interesante. Aclarar, sin embargo, que las expectativas juegan mucho a su favor ya que no esperaba nada especial que disfrutar de una historia de amor facilona por dos protagonistas que, personalmente, me encantan.

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