Dos adaptaciones de época con diferentes resultados

Esta temporada podremos disfrutar de dos adaptaciónes de dos novelas de época famosísimas: Orgullo y Prejuicio de Jane Austen y Memorias de una Geisha de Arthur Golden.

Joe Wright es el director debutante encargado de poner en imágenes la segunda adaptación cinematográfica de Orgullo y Prejuicio. Wright cuenta con un excelente reparto en el que destacan una sorprendente Keira Knightley, Brenda Blethyn, Donald Sutherland o Judi Dench en una breve aparición.
En conjunto la cinta es un notable ejercicio clásico que se deja ver con mucho agrado, en el que destaca el buen hacer de su reparto (con una gran Keira Knightley, aprovechando el primer papel de verdad en su corta pero exitosa carrera). Recuerda mucho a Sentido y Sensibilidad, no en vano ésta también se basaba en una novela de Austen, sin embargo personalmente prefiero la película de Wright.
El film ha conseguido un éxito comercial y crítico muy importante en el Reino Unido. Con un bajo presupuesto la cinta lleva recaudados más de 87 millones de dólares en todo el mundo, con muchos paises pendientes de estreno.
Además, Orgullo y Prejuicio ha conseguido cuatro candidaturas a los Oscar (mejor actriz -Knightley- BSO, dirección artística y vestuario), 6 a los BAFTA o dos a los Globos de Oro, entre otros reconocimientos.
*** 1/2

Por otro lado nos encontramos con la adaptación del famoso best-seller internacional Memorias de una Geisha. Durante muchos años se había especulado con que directores como Spike Jonze (Cómo ser John Malkovich, Adaptation) o Steven Spielberg (que ha terminado ejerciendo como productor).
Finalmente ha sido Rob Marshall (director de la ganadora del Oscar Chicago) el que se ha puesto finalmente tras las cámaras. Delante de ellas aparece un destacado conjunto de actores chinos (lo que ha desatado la polémica entre chinos y japoneses, ya que las geishas pertenecen a la cultura de estos últimos) como son Zhang Zhiyi, Michelle Yeoh, Gong Li o Ken Watanabe.

La película cuenta la historia de cómo Sayuri se convierte en geisha. A pesar de sus excelencias técnicas, sus notables interpretaciones y algunos momentos logrados (como el baile ofrecido por Sayuri), Memorias de una geisha acaba convirtiéndose en una cinta fallida gracias a su cuestionable guión y a la nula emotividad de la historia .
Después de una cinta prácticamente como lo fue Chicago se esperaba algo más de Rob Marshall en esta superproducción.
Tras verla no es de extrañar ni la fría recepción obtenida por la crítica internacional ni la marginación que ha sufrido en las principales características de los Oscar (únicamente ha recibido 6 nominaciones menores).
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Posted in: Críticas,Críticas 2009