54 ed. SS, Zabaltegui: Pequeña Miss Sunshine

Los Hoover son una familia conflictiva: el abuelo esnifa cocaína y suelta palabrotas, el padre da cursos sobre el éxito con estrepitoso fracaso, la madre no da abasto, el tío se recupera de un suicidio frustrado al ser abandonado por su novio, el hijo adolescente lee a Nietzsche y se niega a hablar, y la hija pequeña, Olive, gafotas y ligeramente gordinflona, quiere ser una reina de belleza.
Casualidades de la vida que aquí no voy a desvelar hacen que se embarquen en un viaje y se apilan en su oxidada furgoneta Volkswagen, dirigiéndose hacia el Oeste en un trágicómico periplo de tres días lleno de locas sorpresas que les lleva al gran debut de Olive, el cual cambiará a esta familia de inadaptados de una forma que nunca hubieran imaginado.

¿Es Pequeña Miss Sunshine la mejor película exhibida en el último Festival de San Sebastián? Ganadora del premio TCM del público (superando a Babel) y tercera en el premio otorgado por el Jurado Joven , la ópera prima del matrimonio formado por Jonathan Dayton y Valeria Faris (que habían trabajado anteriormente en el mundo del videoclip) es divertida, tierna, emotiva, diferente pero, sobre todo, rezuma autenticidad por los cuatro costados. Logra que te atraigan e importen los personajes, a pesar de que en apariencia se está haciendo un retrato de una familia de perdedores (aunque en realidad no lo sean en absoluto). Buena parte del éxito de la película corresponde a su genial reparto: desde Steve Carell (excelente comediante visto en Como Dios, Virgen a los 40 o el remake americano de La Oficina) hasta Alan Arkin (aprovechando sus escenas al máximo), pasando por Toni Collete (una de las actrices más destacadas de nuestra generación), Greg Kinnear (a pesar de su -a ratos- odioso personaje), Paul Dano y la revelación de la película, la estupenda Abigail Breslin.

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Lo mejor: El guión y su impresionante reparto
Lo peor: Que pueda pasar desapercibida para el público general.
La escena: El número músical final

El 20 de octubre se estrena en los cines españoles esta pequeña gran joya. La película ha sido la sensación de festivales como Sundance, Deauville o, recientemente, San Sebastián. Además es una de las películas con mejores críticas del año en Norte América y está sonando mucho de cara a la próxima edición de los Oscar.
No os la perdais.

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