
Acudí esperanzada a ver la tercera entrega de esta saga de piratas y la verdad es que no me ha decepcionado.A grandes rasgos, Piratas del Caribe: En el fin del mundo es altamente entretenida y no se hace larga a pesar de su excesiva duración, y tiene sus dosis de humor. Cumple su función.El guión, como viene siendo habitual en todas las entregas, tiene bastantes entresijos, bastantes giros y, en ocasiones, es hasta lioso, lo que lo hace considerablemente interesante, incluidas las secuencias más fantasiosas como los miles de Jack Sparrows en el barco movido por cangrejos.Jack Sparrow no ha perdido su frescura aunque, sin embargo, su humor no es tan efectivo y fresco como en la primera entrega o, incluso, la segunda. Con todo, Johnny Deep hace...